DUELOS, MUERTES, RUPTURAS... EN DEFINITIVA AQUELLO A LO QUE LLAMAMOS "PÉRDIDAS" DE TODO TIPO, EMOCIONALES Y MATERIALES, por Inma Infante Quintero, la Diosa Crecimiento Personal:
En artículos anteriores a este escribí sobre la verdadera definición del famoso “desapego”. Yo aportaba algo así como que lejos de los fastidiosos extremos del aferramiento máximo y de la libertad extrema que nos aísla de...l Mundo, el verdadero desapego era el arte de amar apegándose “lo justo”, ni más ni menos y ponía de ejemplo el hecho de atar a las personas, situaciones, recuerdos, lugares, objetos, etc… con un lacito, el cual siempre es más fácil de desatar en el caso de que llegue la hora de “soltar”. Si nos aferramos al máximo, cuando llega la hora de la muerte, partida, pérdida, ruptura en vez de un lazo nos encontramos con un nudo que por más tiempo que pase es muy complicado desatar porque lo hemos anudado con todas nuestras fuerzas, basadas en nuestros miedos a vivir sin ese algo, sin esa persona, sin ese recuerdo… El lazo se traza desde el amor y el nudo desde la necesidad. Advirtamos pues las diferencias.
Sobra decir que con un buen proceso de coaching transpersonal y de forma aun más profunda usando Terapia de Bioneuroemoción y una nueva herramienta llamada “Proceso Mar” para pérdidas y duelos de todo tipo en la que me formé hace unos meses, puedo ayudarte a superar una muerte, una ruptura tuya o de tus padres, o de alguien cercano que te afecte, un alejamiento físico de alguien que por ejemplo se va a vivir fuera, a sanar un trauma o recuerdo doloroso y dejarlo ir, la pérdida de algo material como una casa, un coche, un objeto con alto valor sentimental para ti, etc…
OS VOY A CONTAR UN SECRETO… Todas estas situaciones de rupturas y pérdidas provocan dolor, rencor, ira, rabia, miedo, asco, y todo tipo de emociones y sentimientos que catalogamos puntualmente como “malos” ¿cierto? Pero, ¿os habéis preguntado alguna vez para qué sirven o mejor dicho qué papel desempeñan estas emociones y si sabemos que nos provocan sufrimiento por qué nos cuesta tanto deshacernos de ellas? Lo lógico sería que al saber que nos produce dolor ser capaces de soltar todas estas situaciones y así ser libres de ese dolor ¿no?
El sufrimiento, ese rencor que nos negamos a sanar y a perdonar, ese recuerdo, ese miedo, esa rabia, ese llanto, esa rabia, esa tristeza tan sumamente profunda, ¿sabéis para qué sirve? PARA MANTENER EL NUDO. Sí amigos/as, de forma consciente deseamos soltar todo este lastre doloroso y ser libres de todo sufrimiento y ofuscación, de nuestra actividad mental sólo somos conscientes en un 5% y toooooodo un 95% de nuestra actividad mental es inconsciente. Esto quiere decir que inconscientemente OPONEMOS RESISTENCIAS PARA SOLTAR. ¿Por qué? Porque inconscientemente aun pretendemos estar atados a esa persona, a ese recuerdo, a ese objeto, etc… porque TENEMOS MIEDO AL CAMBIO, y esa inseguridad asola nuestra alma y de forma inconsciente alargamos el dolor, el rencor, la rabia, la culpa, etc porque inconscientemente sabemos que así nos mantendremos aferrados.
En artículos anteriores a este escribí sobre la verdadera definición del famoso “desapego”. Yo aportaba algo así como que lejos de los fastidiosos extremos del aferramiento máximo y de la libertad extrema que nos aísla de...l Mundo, el verdadero desapego era el arte de amar apegándose “lo justo”, ni más ni menos y ponía de ejemplo el hecho de atar a las personas, situaciones, recuerdos, lugares, objetos, etc… con un lacito, el cual siempre es más fácil de desatar en el caso de que llegue la hora de “soltar”. Si nos aferramos al máximo, cuando llega la hora de la muerte, partida, pérdida, ruptura en vez de un lazo nos encontramos con un nudo que por más tiempo que pase es muy complicado desatar porque lo hemos anudado con todas nuestras fuerzas, basadas en nuestros miedos a vivir sin ese algo, sin esa persona, sin ese recuerdo… El lazo se traza desde el amor y el nudo desde la necesidad. Advirtamos pues las diferencias.
Sobra decir que con un buen proceso de coaching transpersonal y de forma aun más profunda usando Terapia de Bioneuroemoción y una nueva herramienta llamada “Proceso Mar” para pérdidas y duelos de todo tipo en la que me formé hace unos meses, puedo ayudarte a superar una muerte, una ruptura tuya o de tus padres, o de alguien cercano que te afecte, un alejamiento físico de alguien que por ejemplo se va a vivir fuera, a sanar un trauma o recuerdo doloroso y dejarlo ir, la pérdida de algo material como una casa, un coche, un objeto con alto valor sentimental para ti, etc…
OS VOY A CONTAR UN SECRETO… Todas estas situaciones de rupturas y pérdidas provocan dolor, rencor, ira, rabia, miedo, asco, y todo tipo de emociones y sentimientos que catalogamos puntualmente como “malos” ¿cierto? Pero, ¿os habéis preguntado alguna vez para qué sirven o mejor dicho qué papel desempeñan estas emociones y si sabemos que nos provocan sufrimiento por qué nos cuesta tanto deshacernos de ellas? Lo lógico sería que al saber que nos produce dolor ser capaces de soltar todas estas situaciones y así ser libres de ese dolor ¿no?
El sufrimiento, ese rencor que nos negamos a sanar y a perdonar, ese recuerdo, ese miedo, esa rabia, ese llanto, esa rabia, esa tristeza tan sumamente profunda, ¿sabéis para qué sirve? PARA MANTENER EL NUDO. Sí amigos/as, de forma consciente deseamos soltar todo este lastre doloroso y ser libres de todo sufrimiento y ofuscación, de nuestra actividad mental sólo somos conscientes en un 5% y toooooodo un 95% de nuestra actividad mental es inconsciente. Esto quiere decir que inconscientemente OPONEMOS RESISTENCIAS PARA SOLTAR. ¿Por qué? Porque inconscientemente aun pretendemos estar atados a esa persona, a ese recuerdo, a ese objeto, etc… porque TENEMOS MIEDO AL CAMBIO, y esa inseguridad asola nuestra alma y de forma inconsciente alargamos el dolor, el rencor, la rabia, la culpa, etc porque inconscientemente sabemos que así nos mantendremos aferrados.
¿Qué influye DIRECTAMENTE para que nos mantengamos aferrados a este sufrimiento además del miedo? LA CULPA. En un porcentaje muy bajo se siente la culpa de forma consciente, y en un porcentaje muy elevado se siente la culpa de forma inconsciente. Cuando alguien a quien amamos fallece, o se enferma gravemente, tenemos una especie de “programación mental” adquirida por los años y herencias familiares, educación, cultura, religión, televisión, influencias de todo tipo y nuestras propias creencias limitantes, que nos hace creer algo así como “qué malo somos por seguir vivos y disfrutar de la vida a pesar de la muerte o enfermedad de esta persona”. Esto es lo que nos dicen los egos de nuestra mente A NIVEL INCONSCIENTE. También sucede cuando somos nosotros los que rompemos con nuestra pareja porque hemos dejado de amarla y/o porque hemos encontrado a otra persona diferente de quien nos hemos enamorado loca y profundamente. A veces también esa culpa aparece a nivel inconsciente cuando has cometido un grave error por el cual has dañado severamente a alguien (emocional y/o físicamente) y te sientes poco merecedor de su perdón por lo que la culpa es tu forma de autocastigarte y boicotearte la vida y la felicidad constantemente.
MIEDO Y CULPA (dos grandes aspectos que yo analizo de cada persona en mis maravillosos Informes de Numerología, los cuales os recomiendo). Por tanto daros cuenta del pulso que os juega vuestra mente, la cual a veces es recurso y otras veces limitación, y todo dependerá de vuestra intuición y sentido común y sobretodo del amor hacia vuestra persona. Alguien que tiene aprecio por su persona o lo que es lo mismo, alguien que tiene sana su autoestima valorará las oportunidades de ser feliz que se le presenten y sabrá cómo y cuando cortar estos vínculos tóxicos que le unen a personas, cosas, recuerdos y situaciones desagradables.
Recuerdo el caso de una chica preciosa que vivía atormentada por la muerte de su hermana pequeña y se sentía culpable por la enfermedad que tuvo y su muerte. La mente es así. Se inventa culpas con el fin de que te des cuenta de lo poco que te valoras y te amas. Esa chica se sentía mal por arreglarse y salir de fiesta con sus amigos/as. Se sentía mal por echarse novio. Se sentía mal por sencillamente vivir y que su hermana estuviera muerta. En mitad de la terapia recuerdo que le dije una frase que me nació del alma y con la que ella obtuvo un antes y un después. Le dije “qué pena que lo único que te une a tu hermana son culpas, tristezas y sufrimientos, cuando debería ser lo contrario y que os uniera el amor, el tiempo compartido, etc…” De pronto ella se dio cuenta de que toda esa culpa, rabia y miedo sólo existían para boicotear su intento de ser feliz en la vida. Y hay casos en donde una persona muere por causa de otra, muchas veces sin ser intencionado. En esos casos es bueno hacer terapia y practicar el perdón a uno mismo. Pero en los casos en los que alguien muere o enferma siendo libres nosotros de toda responsabilidad ni siquiera hay que pedir perdón a nadie ni perdonarse. Esta chica ahora es feliz, y por fin vive porque lo que le une a su hermana es un lazo de amor en vez de un nudo de culpa.
Recuerdo otro caso de un chico adolescente que sus padres se acababan de divorciar y él no lo aceptaba. ¿Sabéis cuál era el motivo inconsciente de su falta de aceptación? Varios… MIEDO A SENTIRSE ABANDONADO, CULPA POR CREER QUE ESA SEPARACIÓN ES A CAUSA DE ÉL, RABIA Y RENCOR HACIA UNO DE SUS PADRES POR ABANDONAR AL OTRO, EGOÍSMO POR PRETENDER MANTENERLOS UNIDOS AUN SIN YA AMARSE SÓLO PARA QUE ÉL SE SIENTA A GUSTO, MIEDO AL FUTURO, ETC… Cuando en mitad de la terapia se dio cuenta de todo esto se sintió muy apenado y supo que soltar el nudo que aferraba a sus padres les iba a proporcionar a los tres mucha más felicidad. Todos esos sentimientos y emociones negativas sólo servían de excusa para mantener el conflicto activo y seguir aferrado a lo que él creía “la familia perfecta”, y el cambio a otra situación diferente le atemorizaba. Ahora sus padres han rehecho sus vidas y él disfruta de los dos, ya en ningún momento se siente abandonado ni con una familia desestructurada porque ha aprendido que la palabra familia define a seres que se aman, estén donde estén y con quien estén.
Y también recuerdo casos de personas que perdieron sus empleos, sus casas, algún objeto y otras que estaban aferradas a recuerdos de épocas felices pasadas que se fueron y que odiando sus vidas presentes osbtaculizaban su felicidad. La realidad es que todos, experimenten la pérdida que sea, tenían en común el miedo, la culpa, la rabia, la ira, la tristeza, y una vez liberadas, expresadas, gritadas, lloradas y SENTIDAS se pueden LIBERAR PARA SIEMPRE. Porque para aceptar una pérdida es necesario SENTIRLO, experimentar el dolor, dejar que nos cale hondo, porque lo que realmente duele más es la resistencia a experimentarlo, y una vez que permitimos que el dolor nos inunde, el dolor se va, y se lleva las culpas, los miedos, los viejos rencores, la rabia y la ira para siempre.
RECORDEMOS (ME INCLUYO): LOS NUDOS DE LA NECESIDAD ATAN, LOS LAZOS DEL AMOR UNEN SIN ASFIXIAR.
ME LLAMO INMA INFANTE QUINTERO Y SOY LA CREADORA DE LA DIOSA CRECIMIENTO PERSONAL. SI TE HA GUSTADO/AYUDADO ESTE ARTÍCULO, ¿ME AYUDAS A COMPARTIRLO? TE INVITO A MI PÁGINA Y SI TE GUSTA DALE UN LIKE ¡GRACIAS!
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